El amor se ha convertido en un sentimiento más en un mundo
extrañamente incomprendido. Con todas las nuevas tecnologías ni siquiera
podemos distinguir entre enfado, alegría o tristeza. Y yo me suelo preguntar
que si antes era difícil leer los ojos de alguien que te importa, ¿cómo es
posible que nos hayamos enganchado a máquinas tan simplificadoras de estas
relaciones humanas? E incluso con más incisión ¿cómo podemos llegar a amar así?
Esa palabra tabú en la mayoría de las relaciones amorosas, e
incluso en la mayoría de relaciones humanas era difícil de decir, de expresar.
De transmitir y confesar. De hecho, el simple gesto de intentar confesar un
"me gusta", en términos de otra persona, ya era insultantemente
difícil sin importar la edad ni los estudios. ¿Y ahora? Ahora es
desquiciadamente fácil. El sentido que pudieron haber tenido esos sentimientos
han cambiado y solo unos pocos elegidos se salvan. O se maldicen. Ya que eso de
ser "romántico" o simplemente expresar lo que sientes es de débiles,
cobardes y demás gilipolleces. Me gustaría, me encantaría ver a esa gente que
usan estos nuevos métodos tan siquiera intentarlo o pensarlo. Bueno si es que
eso de pensar sigue de moda porque parece todo lo contrario.
Y es que en esta sociedad los valores cuestan distinguirse.
Orgullo, sabiduría y fuerza reinaron en antaño. Bueno sabiduría, eso ponían en
sus emblemas al menos. Después llegaron igualdad, tolerancia y honestidad. Que
honestamente, la honestidad se la pasaron por donde todos sabemos. Y ahora
libertad. Una hermosa palabra para describir estupidez.
Los humanos, queridos lectores, somos simples. Mucho más
simples de lo que ninguno de nosotros reconoceremos, porque ¡eh! Algo de
orgullo sigue ahí. Tan sencillo como que cogemos siempre lo peor de cada época.
Porque es lo que nos resulta más cómodo quizás. No sé la verdad es que la
naturaleza humana sería difícil de definir.
¿Y a qué vienen estas últimas parrafadas? El amor se ha
malogrado desde que se inició como movimiento romántico. Ya que realmente no
existió antes de este, era solo deseo, deseo de estar en la vida y en la muerte
con la otra persona, deseo de sentir la felicidad de la otra parte por encima
de todo. Pero su voz se tornó con este movimiento y ha ido desvariando a lo
largo del tiempo hasta llegar a nuestros días.
Que sí, que esto ha sido una introducción un tanto larga
para la conclusión que os voy a decir ahora mismo, sin dejar de recordaros que
es una opinión personal:
El amor no es más que una palabra. Hay gente que la usa con
una libertad demasiado ligera, sin licencia ni pasión. Y por supuesto habrá que
juegue con ella de manera que cree pedazos de corazones a su paso, muros de
hielo y personas frías tristes, sin fe.
Pero también habrá quien no comprenda de esta palabra. Quien solo desee con
todo su ser que la otra persona sea feliz, con o sin ella. Y eso es, queridos
lectores, amor. Y me gustaría gritar a los cuatro puntos cardinales que aún
existe y que por favor, nunca pierdan esa esperanza, esa fe.
¡¡Hola!!
ResponderEliminarEl amor si existe y no siempre es una palabra vacía que se va con el viento, pero tristemente mucha gente la usa con demasiada ligereza, como quien dice hola, sin importar lo que puede desencadenar algo asi por eso hay que aprender a ver más allá de las palabras y creer en los hechos y en muchas otras cosas donde se demuestra si se verdad se quiere.
Escribes genial.. Me encanta, sigue así :)
Un beso ^^
¡Hola!
EliminarMuchísimas gracias por comentar y por hacer una pequeña reflexión acerca de la entrada. La verdad es que me encanta ver que realmente lo que escribo hace pensar.
Un gran abrazo y gracias! :DD